BRUJAS
Parte 1: BOMBONES Y CHOCOLATE

En Semana Santa descubrimos la ciudad de Brujas en carroza. Lo que llamó la atención, aún desde la carroza, fue la abundancia de figuras de chocolate en los escaparates de las tiendas. Además, existen en todo tipo de formas: liebres, huevos, gallinas con pollitos y, claro, los bombones clásicos. En la bombonería The Chocolate Line no sólo puedes comprar todos los chocolates que quieras, sino que también puedes probarlos. Lo más excepcional es que también puedes hacer tus propios bombones. Si haces una cita, puedes prepararlos con tus propias manos: eliges el tipo de chocolate, el sabor, las decoraciones, etc.

© Valérie Smessaert

En realidad, el chocolate es una especialidad belga. Dentro de poco veremos cada vez más bombones en forma de corazón, ya que llega el Día de la Madre. No sólo es importante en España, sino también en Bélgica, aunque el día que se celebra es distinto. En Bélgica el Día de la Madre se celebra el segundo domingo del mes de mayo, con la excepción de la provincia de Amberes, donde siempre se celebra el 15 de agosto. En ese día hay una atención especial para las madres: reciben un pequeño regalo como flores, dibujos, cartas, bombones, etc. Los hijos hacen todo lo posible para satisfacer a las madres e intentan, por supuesto, tratarla como una reina.                                                                                                                                                                                                                                    

                                                                                                                                                 © Florence Van Staey

Sin embargo, el chocolate se regala en más ocasiones: la San Valentín, un aniversario o en la Fiesta de San Nicolás, que en Bélgica se celebra el 6 de diciembre para los niños y que es un equivalente de los Reyes Magos. ¡En realidad, en Bélgica se come chocolate todos los días! ¿Ya sabías que un belga come aproximadamente diez kilos de chocolate al año? ¡Es inimaginable!

Si quieres probar chocolates y encontrar todos los sabores, Brujas es el lugar para estar. Con el encanto de la ciudad, es el mejor sitio para probarlos. Incluso cuenta con un museo, el Choco-Story. Al hacer la excursión en carroza, que tarda aproximadamente una hora, pasamos por algunas bombonerías:

- The Chocolate Line.

- Bombonería Sukerbuyc.

- The Old Chocolate House.
- Marie de Bruges.

- Bombonería Dumon.

© Valérie Smessaert

- Bombonería Verheecke.

- Leonidas.

- Moeder Babelutte.

- Neuhaus

- Pralinette.

- Roose’s chocolate world & coffee corner.

- etc.

Además de eso, tienes tiempo para descubrir los rincones escondidos de Brujas: los beguinajes, que son un tipo de convento medieval, las tiendas de encaje y las de Moeder Babelutte (la «Madre Babelutte», un tipo de caramelo hecho principalmente de azúcar).

El chocolate: un poco de historia

El chocolate es uno de los productos de exportación más importantes en Bélgica: su composición es muy específica y la calidad es muy alta. Fueron los españoles quienes introdujeron en el siglo XVI el cacao en el continente europeo (Hernán Cortés). Por sus viajes a las Indias llegaron en contacto con una bebida mexicana llamada cacao, la cual los españoles después nombraron chocolate. La bebida estaba hecha de frijoles de cacao con agua y era muy amarga. Ahora añadimos leche en vez de agua y (un poco de) azúcar para hacerla más dulce.

Los Reyes Católicos y sus sucesores difundieron el chocolate por el continente. Sin embargo, los belgas después mejoraron la receta de las barras de chocolate y los bombones, por lo que son muy conocidos en la actualidad. Fue Jean Neuhaus, un confitero belga con raíces suizas, quien inventó en 1912 el bombón como lo conocemos ahora, es decir, en varias formas, con diferentes rellenos, envoltorios y decoraciones. No obstante, el término pralisne (bombón) ya data del siglo XVII. Su inventor, el mariscal Plessis Praslin, tuvo la idea de preparar almendras en azúcar hervido. Este dulce es el precursor del bombón belga, ahora mejor conocido bajo el nombre praline. 

(Historias basadas en: Inghelram, L. & R. (2008). Sweet Belgium. Oostkamp: Stichting Kunstboek.)

Una receta secreta de la cocina flamenca: Mousse de chocolate

© Florence Van Staey

DURACIÓN: +/- 40 minutos

INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:

- 200g de chocolate

- 4 cucharadas de azúcar en polvo

- 4 huevos

- 100g de mantequilla

- 2 cucharadas de café fuerte

PREPARACIÓN:

Corta el chocolate en trozos y hazlo fundir a fuego lento, añadido del café. Cuando esté cremoso y espeso, añade el azúcar en polvo, la mantequilla cortada en trozos y las yemas de los cuatro huevos. Remueve la masa con una cuchara de madera hasta que haya fundido completamente y sea homogénea. ¡Cuidado que no hierva!

Luego, añade una pizca de sal a las claras de los huevos y bátelas a punto de nieve. Mezcla con la masa, todavía tibia. Vierta todo en un recipiente o en copas individuales y pon la mousse en el refrigerador hasta el momento de servirlo.

¡Buen provecho!

Parte 2: LOS KLETSKOPPEN

Por supuesto, aparte del chocolate también existen otras especialidades en Brujas. Probamos dos dulces más que nos encantaron tanto que no pudimos omitirlos en este blog.

¿Sabías, por cierto, que la ciudad es conocida por su encaje? Además, existe una galleta que se parece a una tela de encaje. Estas galletas las llamamos kletskoppen. En varios dialectos flamencos su nombre tiene dos significados: los parlanchines o los calvos. El verbo kletsen significa «charlar muchísimo». La palabra klets, por su parte, significa «calvo». Este último significado es más apropiado para la mayoría de los flamencos, ya que las galletas «brillan» como una cabeza calva. Según nosotras, las galletas refieren a las parlanchinas, ya que se comen muy a menudo a la hora del té, un momento en el que las mujeres se ponen al día con sus amigas.

La galleta misma es muy crujiente, hecha a base de huevos, almendras y mantequilla. Lo sorprendente es que su forma plana sólo se forma en el horno. Esto se debe a que la mantequilla y el azúcar (o el jarabe) hacen allanar la galleta.

(Fuente imagen: http://www.kookse.tv/recept/kletskoppen, última verificación 15.05.2012.)

(Historia basada en: Inghelram, L. & R. (2008). Sweet Belgium. Oostkamp: Stichting Kunstboek.)

Receta: Kletskoppen

DURACIÓN: +/- 200 minutos

                 10 minutos de preparación

     180 minutos en el frigorífico

                 10 minutos en el horno

INGREDIENTES:

- 60 almendras (ralladas)

- 125g de harina de trigo

- 250g de azúcar glas de color moreno

- 50ml de agua

- 75g de mantequilla derretida

PREPARACIÓN:

Mezcla todos los ingredientes y agrega el agua como último. Pon la masa en el frigorífico por unas 3 horas. Luego, haz bollitos de la masa y ponlos en una bandeja cubierta con papel de horno. ¡Cuidado que no se peguen el uno al otro! Asa los bollitos entre unos 8 y 10 minutos en el horno y déjalos enfriar antes de quitarlos del papel de horno.

¡Disfrútalo!

(Receta basada en: Huysentruyt, P. (2011). SOS Piet 5. Tielt: Lannoo., citado por http://zesta.be/recept/kletskoppen, última verificación 29.05.2012)

Parte 3: LOS CISNES DE BRUJAS

Otra receta secreta de la cocina flamenca: Cisnes de Brujas

DURACIÓN: +/- 60 minutos

INGREDIENTES PARA 2 PERSONAS:

- 125ml de agua

- 50g de margarina

- 75g de harina

- 2 o 3 huevos (dependiente de la densidad de la masa)

- 250ml de nata batida

- 1 sobre de vainilla azucarada

(Fuente foto: http://www.cakieshq.com/wp-content/uploads/2011/09/patisseriecursus-02-kookdeeg-soezen-5.jpg, última verificación 29.05.2012) 

PREPARACIÓN:

1/ La pasta

Hierve el agua y la margarina en una olla. Añade la harina y mezcla todo con la cuchara de madera hasta que la masa se desprenda del fondo de la olla. Quítala del fuego y sigue mezclándola por 10 minutos. Agrega los huevos uno por uno. Si la masa todavía está demasiado densa después del segundo huevo, se puede añadir otro. Reparte en la bandeja de horno ¾ de la masa en pequeñas porciones ovales y ¼ en cuellos largos. Deja asar 30 minutos a 200°C en el horno. ¡No abra el horno hasta pasado los 30 minutos! Deja enfriar en una rejilla para tartas. Finalmente, corta las porciones ovales horizontalmente en dos. Una parte representará el cuerpo de los cisnes y se llenará con la crema. La otra parte servirá como alas.

2/ Relleno de crema batida:

Bate la nata y agrega el sobre de vainilla azucarada. Mezcla de manera prudente y rellena el cuerpo del cisne con esa masa.

3/ Cisnes de Brujas:

Para hacer los cisnes, vuelve a cortar el resto de la pasta en dos y coloca ambas partes en la masa de nata batida como si se hicieran alas de cisne. Agrega la última parte de la masa, representando el cuello y la cabeza del cisne. (Se puede añadir un poco de azúcar en polvo en las alas para una presentación más bonita.)

¡Buen provecho!